Orientación privilegiada en una casa urbana
CASA PASIVA EN PINEDA DE MAR
Proyecto realizado conjuntamente con Llar Arquitectura
Conseguir una casa pasiva a nivel energético, luminosa y funcional, los grandes requisitos de la familia
CONTEXTO
Se trata de la primera de una serie de casas entre medianeras en Pineda de Mar, siendo esta la que cierra el conjunto al sur, y por lo tanto, disfrutando no solo de dos fachadas a este y oeste, sino de tres (cuatro si contamos la diagonal al suroeste que por adecuación urbanística debía hacerse). De esta manera, la única pared medianera es la que da al resto del conjunto de casas al norte (actualmente, es una fachada más y aislada como tal, hasta que se construya el resto).
PROGRAMA
El reto era conseguir una distribución versátil para la familia en un solar con una forma extraña (por la fachada diagonal de la que hablábamos antes), y con el requisito de que en planta baja hubiese un aparcamiento y una zona de instalaciones de buenas dimensiones. Esto rompía esa relación más directa de los espacios de día con el jardín, pero la familia lo tenía muy claro. Un gran porche en relación con el jardín y la piscina para disfrutar con la familia y amigos, además del acceso, completan esta planta baja.
En la planta primera se desarrolla el programa de día con una gran sala de estar unida a la cocina-comedor, que a su vez tiene salida directa a una terraza que queda dentro del volumen de la casa. La parte de la planta en relación con la fachada diagonal contiene un pequeño despacho, que puede quedar separado del resto de la planta mediante una gran puerta corredera. Completando la franja de servicios situada al norte de la parcela, que forma la escalera, la reserva de espacio para el ascensor y parte de la cocina, encontramos un baño con el inodoro separado del lavabo.
En la planta segunda encontramos la zona de noche, con tres habitaciones, una de ellas con baño y vestidor incorporados. El baño de los pequeños también se integra en esta franja de servicios al norte. Al igual que en la primera planta, la parte de la planta en relación con la fachada diagonal está ocupada por un lavadero, que puede formar parte de la zona de paso o quedar independiente con otra gran puerta corredera.
SOSTENIBILIDAD
La familia tenía muy claro que quería una casa de consumo casi nulo y se calculó siguiendo el estándar Passivhaus; una orientación prácticamente al sur de todas las estancias, más una muy buena protección solar con persianas motorizadas y lamas orientables dieron como resultado unas demandas de calefacción y refrigeración por debajo de los 15kWh/m2.año. El aislamiento de las fachadas se resolvió con un SATE de 12 cm de lana de roca, así como todo el techo de la planta baja, al encontrarse fuera de la envolvente térmica. También la solera se aisló por debajo con XPS. En la cubierta se recurrió a un total de 23 cm de aislamiento. La hermeticidad de la casa se resolvió con el acabado de yeso pintado de los paneles prefabricados.
A nivel de instalaciones, se recurrió a una bomba de calor de aerotermia para la producción de ACS (agua caliente sanitaria) y para la calefacción y refrigeración de la casa mediante suelo radiante.
Como toda Passivhaus, la casa está permanentemente ventilada con un sistema de ventilación mecánica con recuperador de calor y humedad. Además, también se instaló un sistema de climatización extra aprovechando la instalación de ventilación.
En la cubierta se instalaron placas fotovoltaicas para la producción de electricidad que cubren la mayor parte de la poca demanda eléctrica que la casa tiene.
MATERIALIDAD
En la planta baja se recurrió a una mezcla de obra tradicional y sistemas prefabricados ligeros, y desde la primera planta hasta la cubierta con un sistema de paneles prefabricados pesados de hormigón con aislamiento incorporado. La cubierta inclinada se resuelve con teja cerámica.
A nivel compositivo, la casa respira un lenguaje moderno, de líneas puras y sencillas, con el blanco de las fachadas y el negro de las carpinterías como un gran cuadro abstracto y atemporal. La terraza en relación con la sala y la cocina-comedor actúa como otro gran hueco dentro de la fachada.
La familia vive con felicidad y confort en una casa que, según sus palabras, “parece mucho más grande de lo que es” y demuestra que la confianza mutua es clave para lograr un resultado como este.
Si quieres una casa como esta, ¡hablemos! 👋